domingo, 28 de julio de 2013


"la Obra debe participar en la vida y en la construcción del mundo." Valdímir Tatlin

“Si se desea enseñar al ojo humano a ver de una forma nueva, es necesario mostrarle los objetos cotidianos y familiares bajo perspectivas y ángulos totalmente inesperados y en situaciones inesperadas; los objetos nuevos deberían ser fotografiados desde diferentes ángulos, para ofrecer una representación completa del objeto.” Alexander Rodchenko

Podríamos comenzar hablando del origen del huevo y de lo subjetivo en la apreciación artística. ¿Quién sabe que es arte en estos tiempos? El arte se ha puesto en duda de su propia existencia, algo así como la existencia de un dios. ¿Quien tiene la última palabra frente al arte? ¿No es el público acaso quien acepta como arte cualquier cosa? ¿Pero quién es el público del arte? ¿Qué vinculación directa tiene el público con el objeto que ellos llaman arte? ¿La voz de uno es la voz de todos? ¿Cuál es pues la función del arte para con el público más que el mero hecho de adornar alegóricamente un espacio, un instante? Es difícil precisar el valor real del arte frente al desarrollo. El arte no tiene una direccionalidad específica, no es una ciencia que maneja un tema con soberanía.

Los artistas hablan de la imagen como su fuerte, ¿pero quién les da a ellos el valor de ser los conocedores supremos de la imagen? Sus estudios e investigaciones poco pueden ser comparados con la ciencia. No se niega que el artista propone nuevas ideas, pero se ven confusas a la hora de materializar esa idea de manera poética. El error mismo de la poética es que quien la comete tiende a sentirse un dios que todo lo ve y todo lo sabe. El poeta-artista olvida en esos instantes que sigue siendo un hombre aun en su plano más elevado. Sus momentos de inspiración no tienen nada de místico o de excepcional, todos esos grandes momentos de inspiración no son más que información recogida en su ente humano. El ejemplo mas claro de esto es el del embudo, la boca por la cual se vierte la sustancia es amplia pero la boca por donde sale la sustancia es pequeña. Eso ocurre con la información recibida por el artista. Todo hombre tiene acceso a la cantidad infinita de toda la historia del hombre pero su recepción es filtrada y mutada por factores ajenos.


¿Acaso un sueño puede contenerse en la idea de un solo hombre?

sábado, 27 de noviembre de 2010

Palabras al silencio


Tiempo ha que debía haber escrito esto, pero por su olvido ha perdido validez, ya las palabras son y serán inútiles como siempre han sido, el eco mortecino no llegara a ningún oído. El tiempo ha borrado su sentido, la claridad de la idea se ha diluido en el pasado inexistente. Aquello que se posterga se hace rancio, inútil, baladí. Ahora no me queda nada para decir. Sé que el tiempo está a la contra y son menos los instantes que me restan. Veo más lejana e imposible la tarea de finalizar mis textos, a cada instante pierdo la esperanza de terminarlos, siento que con el tiempo aquello inacabado se perderá en la arena y como estas palabras se hará silencio.

lunes, 22 de noviembre de 2010

el oRigeN dE la obRa dE arte (aNalisis dEl eNsayO literario dE la oBra dE hEideGgeR)


El origen de la obra es aquello donde y por lo cual una cosa es lo que es y como es. Este principio es elemental, es su esencia y su instrumento. De allí surge la pregunta ¿Qué es arte? ¿De donde se origina? ¿Es el artista parte de la obra o ella de este? Ninguno de ambos se sustenta por si solo. Es indispensable el uno del otro. Ambos se fusionan con la introducción de un tercero: el arte. ¿Pero que es el arte? Aquí nos lleva la pregunta, ¿como podemos dar fe cierta a que una obra es o no una obra de arte y de que su ejecutor es un artista por ende? Se idealiza pues al artista como el origen de la obra de arte y viceversa, el artista nace o surge a partir de su creación artística. La pregunta eterna del germen y la gallina. El arte es representación del instrumento y de la cosa. Que a su vez se hace cosa-arte. El origen va totalmente ligado a la esencia, a la esencia de la cosa. El arte se esconde en la obra, en la cosa. Lo que es y como es lo que denominamos su esencia. El arte ya no corresponde a nada real.
Todas las obras tienen esa condición de cosas, por ejemplo la obra arquitectónica esta en la piedra y no su contrario. Hay que darle el valor de cosa a la obra. La obra de arte es una cosa confeccionada. Dios mismo es una cosa, según Kant una cosa es el conjunto del mundo. En termino generales una cosa denomina en este caso a todo cuanto no es absolutamente nada, que tiene un origen, un algo.

¿Qué es una obra de arte? ¿Cómo nace una obra de arte? El arte no existe solo, necesita de la obra, del instrumento para su materialización. El arte sin objeto es tan solo un ideal, un pensamiento, nada tangible. El arte y la obra son un circulo que vuelve infinitamente al mismo sitio.

Los caracteres denominan y componen la cosa. La cosa como portador de sus atributos. La cosa que nos produce asombro a pesar de sus habituales caracteres, es el uso de ellos.
Lo colorido, sonoro, duro, macizo son lo material de la obra, allí en lo material esta comprendida la forma.
Lo que hay de cosa en la obra es la materia de la que consta. La materia es la base y el campo de la formación artística.

Forma y fondo son los conceptos fundamentales donde cabe absolutamente todo.
Para hallar la esencia del arte que reside en la obra es necesario escarbar en ella misma descubrir que es y como es. Su forma, su representación, su todo.

El ejemplo claro lo podemos encontrar en la obra de Van Gogh, el cual representa las botas de un aldeano, en ella encontramos la cosa-obra las botas de la aldeana, que reflejan el arduo día del jornal, que se usan diariamente que cargan la fatiga de unos pies cansados, que rememoran al ocupante de estas botas, el uso le da vida a estas botas. Gastadas sucias y golpeadas por el tiempo y el trajín. He aquí lo mas hermoso de la obra la obra es símbolo, no son unas botas, aunque allí se vean representadas, son solo un símbolo. La cosa de la obra es una alegoría. La mera cosa son las botas, unas simples botas pero la obra es cosa que dice algo, que transmite algo mas que la mera cosa. La obra de arte otra cosa es alegoría, símbolo.

La cosa y la obra ambas son lo mismo. Todas las obras son cosas pero no meras cosas. Todas las cosas son cosas, igual una piedra que un árbol o unas botas.


Materia y forma no son determinaciones originarias de la condición de cosa de las cosas, la forma es la que determina la distribución de la materia, la ubicación de los caracteres.
Por otro lado el instrumento revela una afinidad con la obra de arte pues es algo producido por la mano del hombre. La mera cosa es la cosa desprovista de su ser de instrumento. No solo se piensa pues en instrumento, cosa y obra si no en todo lo existente.
Ser-instrumento de su instrumento consiste en su utilidad así como las botas que pinto Van Gohg, que define la utilidad de esta y que y porque las utiliza. Son las botas de una aldeana, que solo las usa para laborar, fatigas y usadas.

El instrumento ocupa una posición intermedia entre la cosa y la obra, una especie de vinculo entre esta dos, es la que le da el valor de uso.

Ser-instrumento del instrumento consiste en su utilidad. En el uso del instrumento se debe hallar lo instrumental de este.

jueves, 23 de septiembre de 2010